50° Aniversario

50° Aniversario

Páginas

Facebook

https://www.facebook.com/eseadeluisguillon/ CORREO OFICIAL: esea1eecheverria@abc.gob.ar

lunes, 25 de mayo de 2020

Acto 25 de mayo en tiempo de pandemia

Para celebrar el 210° aniversario de la Revolución de mayo compartiremos la reflexión realizada por el Profesor Martín de Souza y algunas producciones de nuestros/as estudiantes.
En estos tiempos difícil de aislamiento obligatorio, la ESEA N°1 no quiere dejar de recordar a los hombres y mujeres de la gesta de mayo.


Hoy, 25 de Mayo, celebramos un feliz acontecimiento para nuestro país: el 210 aniversario del 25 de mayo de 1810, cuando se conformó el primer gobierno criollo en el Cabildo de Buenos Aires, pasando del virreinato a las Provincias Unidas del Río de la Plata, que entonces incluía a Paraguay, Uruguay y parte del actual territorio de Bolivia.
   Celebración entonces que marca una esperanza y un compromiso a través de los hechos, una transformación como punto de partida en la continuidad de la historia.
   Estamos en nuestro país argentino en tiempos difíciles.  Un mundo cada vez más globalizado ha tendido a través de las épocas a ubicarnos en la economía mundial, como un país exportador de materias primas con una distribución inequitativa de las riquezas y un fenómeno de exclusión social.  Este largo proceso se inició con el descubrimiento y conquista españolas, pero con el surgimiento de los criollos, hijos de españoles nacidos en América, nació también el deseo de ocupar en forma progresiva, roles fundamentales en la organización social, económica y política y de crear nuevos horizontes para estas tierras.  Los ideales de la revolución francesa, “Libertad, fraternidad e igualdad”, comenzaron a ser parte fundamental de ese deseo y lo expresaron nítidamente a partir del 25 de Mayo de 1810 y formalmente el 9 de Julio de 1816 con la firma del Acta de Independencia. Luego, fueron muchas las generaciones hasta nuestros días que debieron enfrentarse en contextos diferentes con las tendencias de dominación política y económica que, como antes, no solo han traído consecuencias para nuestro país, sino también para cada uno de nosotros como individuos, como ciudadanos.
   La influencia creciente de los medios masivos de comunicación en la consagración del imperio de la imagen por sobre las letras, la fragmentación del discurso y por ende la del sujeto y su identidad, la condición posmoderna en la ruptura de la linealidad de la historia y en una visión individualista de la realidad han planteado y plantean las consecuencias por todos conocidas: un mundo de apariencias e incertidumbres en donde el pasado y el futuro se han vuelto una ilusión desvanecida en el aire bajo el dominio del presente, del aquí y ahora.
   A esta tendencia, respondemos hoy con la memoria y con la esperanza a través de la acción crítica y reflexiva como pueblo, restaurando el relato de la memoria individual y colectiva, pensando en la dignidad, defendiendo nuestros derechos, haciendo honor a nuestras obligaciones, comprometiéndonos en construir juntos un futuro que nos integre a todos, en solidaridad.  Como dijimos, estos tiempos, todos los tiempos con justificadas razones demandan a la Escuela la enseñanza y aprendizaje de saberes y conocimientos ligados a los avances tecnológicos continuos y crecientes, fines instrumentales, necesarios para estar capacitados para la vida laboral; pero también nuestra Escuela debe cumplir su rol en la formación de ciudadanos y de artistas como sujetos históricos, actores de sus propios destinos, seres humanos libres y comprometidos en una comunidad democrática, respetuosos de las minorías, del disenso. Porque el pensamiento y la acción se constituyen mutuamente en un proceso de reconstrucción permanente, en un contexto social vivo y bajo premisas éticas, social y democráticamente establecidas.  La Educación, esta Escuela de Arte, tiene entonces un rol transformador fundamental: el de enseñar y aprender desde la sociedad y hacia la sociedad, construyendo certidumbres que posibiliten la transformación como una utopía que nos oriente y que esté sujeta a la revisión: saber quiénes somos, de dónde venimos, hacia dónde vamos en acción creadora colectiva de alumnos y alumnas, padres y madres, docentes, no docentes, equipo directivo, de nuestra comunidad educativa toda.
   Al comienzo, dijimos que este es un feliz acontecimiento histórico, de celebración, esperanza y compromiso. Hablamos de historia.  Vicente López, un poeta, un artista estrechamente ligado al futuro del país en plena gesta de la Independencia argentina, nos dice en nuestro himno que “se levanta en la faz de la tierra una nueva y gloriosa nación”. En este momento de nuestra historia, en la cual además nuestro pueblo se ve afectado por la pandemia vinculada a la propagación del COVID-19, nuestra escuela se eleva y construye en el trabajo de todos los días, bajo ese mismo ideal.  Renovemos juntos ese compromiso. Cuidémonos. Gracias.

HIMNO NACIONAL ARGENTINO

"Gustito a mistol" (zamba)


"Milagro del tiempo" (zamba)


No hay comentarios:

Publicar un comentario